top of page
  • Foto del escritorJared Escobar

UNA PASIÓN DESDE NIÑA

Con una alegre sonrisa y con tal amabilidad se presentó Lucia Carolina Villalta, una mujer de 45 años que desde niña tuvo un sueño único de ser Doctora. Logro cumplirlo en el año 2004 cuando se graduó oficialmente como médico general, sin embargo, sería hasta el 2009 que lograría obtener su especialización como Ginecóloga y Obstetricista, la cual ejerce hasta la fecha.



Desde muy pequeña tenía claro lo que quería ser, pero fue hasta que se acercaba la fecha para graduarse de bachiller cuando tuvo la convicción de la carrera que deseaba estudiar, pese a que sus padres son odontólogos. Para ella nunca estuvo contemplada la opción de seguir los pasos de ellos, pues a medida que ha pasado el tiempo, ella siempre ha querido forjar su camino y en ningún momento ha tenido a nadie como inspiración.


Es que efectivamente no tiene un ídolo en especifico dentro de su profesión que la motivara a querer ser lo que hoy en día es, como todos se enfocó únicamente en su objetivo sin mirar a un lado y es de esa manera que le ha permitido ser una gran persona y profesional de la salud, lo cual en la actualidad lo avala con su enorme labor.

Lo mejor de su trabajo como bien lo dice es poder ayudar, aliviar el sufrimiento de los demás y hoy en día poder estar el pendiente de los bebés, verificando que todo vaya bien, pero no todo es color de rosas, muchas veces también pierde tiempo de calidad con los suyos y en ocasiones está ausente en momentos y fechas especiales.


“Todos en mi familia estuvieron en desacuerdo con mi decisión, porque me decían que era una carrera de mucho sacrificio y que requiere prácticamente todo el tiempo de uno, pero yo simplemente no los escuche, me enfoque en que yo quería estudiar medicina, era eso o nada, no había otra opción en mi cabeza” añadió Villalta.


Una de las palabras claves que mencionaba la doctora es la empatía y es que como bien ella lo dice, es la base de todo médico para poder ayudar de la mejor manera posible a cada uno de los pacientes que buscan una esperanza en ellos, ya que en muchas ocasiones las personas van pensando en lo peor y buscando respuestas positivas.


La labor del doctor es considerada por muchos como de super héroes, para la Doctora Lucita como cariñosamente la llaman todos, su súper poder sería poder aliviar el sufrimiento de las personas a las que atiende; así mismo si tuviera la posibilidad de cambiar algo en el mundo desde luego sería la pobreza y permitir que todas las personas tuvieran un servicio optimo con un buen sistema de salud. “También que nuestro planeta pudiera ser un lugar de paz y no de guerra”, agregó.



Sin dudas una profesión que a veces no es tan valorada como debería en su totalidad, pero que a pesar de todo siempre están dispuestos a realizar su máximo esfuerzo y salvar la mayor cantidad de vidas posibles, sin importar todos los sacrificios que todo esto conlleve en su vida personal y profesional.

2 visualizaciones0 comentarios

留言


bottom of page