William Sorto, es un comediante de 38 años, que, sin duda, es un gran ejemplo de perseverancia y valentía.
Escrito por Alessandra Mariela Gómez Melgar.
“Tengo bien claro el momento en que lo decidí” dijo William, al preguntarle de donde surgió la idea de hacer comedia. Desde pequeño supo que quería hacer reír a la gente con su ingenio y ocurrencias. La sensación de poder hacer reír a la gente la describe como sentimiento inexplicable y que lo hace cada vez que puede.
En 2019, realizó su primer curso de stand up comedy, con un grupo llamado “Stand Up ES”, lastimosamente ese proyecto cerró, debido a la pandemia de COVID-19, pero esto, no fue un impedimento para William, ya que tomó la decisión de hacer “micrófonos abiertos” en la plataforma de Facebook.
Los micrófonos abiertos, o también conocidos como “open mic”, son espectáculos en vivo, que se suelen hacer en espacios como cafeterías y bares, para que el comediante pruebe sus rutinas en el escenario.
Dos de las figuras por las que se sintió inspirado e identificado cuando comenzó a hacer comedia fueron: Franco Escamilla y Fluffy Guy, ambos son comediantes y actores de origen mexicano, que se han destacado por hacer reír a millones de personas con sus monólogos.
“Hacer esto, fue todo un reto”, resaltó el comediante, ya que realizar open mic en una plataforma en línea, es mucho más difícil y complejo, debido a que no podía ver directamente las reacciones e interacciones que él tenía con el público.
Su comedia la describe como un estilo familiar, con un toque de inocencia y puede llegar a ser ácida. Debido a que, habla mucho de su persona, y en su mayoría, los chistes que ejecuta recaen sobre él, sobre sus vivencias y puntos de vista desde su perspectiva.
El stand up comedy, puede ser mucho más complejo de lo que se suele pensar, pues cada comediante escribe su propio material. Cuando Sorto empezó a escribir sus propios monólogos, lo hacía desde una perspectiva más ligera, con el tiempo y la experiencia, empezó a notar sesgos en sus escritos, ya que tenía un poco más de destreza y agilidad en el tema.
“La comedia es bien subjetiva, lo que les da risa a unos, no les da risa a otros” expresó. Antes de compartir la primera vez que se presentó ante un público y tuvo que escribir su primer guion. “Empecé a escribir cosas que yo pensé que eran graciosas, siendo mi primer show me fui a dar en la boca” manifestó entre risas. Siendo su primera experiencia, no le fue tan bien como él esperaba. Esto no lo hizo quedarse de brazos cruzados, porque buscó espacios que le ayudaron a mejorar y que hoy en día sigue perfeccionando.
Pero, ¿De dónde saca tantas ideas a la hora de escribir?, la respuesta es que todo puede ser comedia, desde experiencias hasta miedos personales. Otra de las cosas que compartió, es su proceso creativo, basado en ver algo, analizarlo y cuestionarse por qué está mal. Luego de esto llega al fondo del problema y lo representa de una manera cómica, ya sea por medio de el sarcasmo, la ironía o diferentes técnicas que se aplican a la comedia.
Un dato curioso sobre el comediante y su proceso creativo es que muchas de sus ideas surgen a la hora de bañarse, por lo tanto, cuando sale, escribe todo lo que se le ocurrió, y pule la idea con más calma. Esto lo hace, para poder llegar más rápido al remate o el cierre del chiste.
El remate, también se le conoce como el cierre de un chiste pensado para poder hacer reír a la gente, se conoce como la tercera y última parte de la estructura típica de un chiste. Es muy importante no saltarse el paso de limpiar las ideas, puesto que, muchas veces, el chiste puede ser muy redundante y hasta difícil de entender para el público.
“Eso del bloqueo, aún no logro terminar de lidiar con ello”, dijo el comediante, al momento de preguntarle como lidiaba con sus bloqueos creativos. Es un proceso complicado, porque muchas veces, ocurren por situaciones que pasan alrededor y son inevitables. Algo que Sorto ha aprendido de todo esto, es dejar enfriar las ideas, para luego retomarlas y verlas desde otro punto de vista con más calma.
La comedia ha llevado a William a diferentes países, junto con ello, se encuentran los diversos retos que conlleva dar shows en el exterior. El adaptarse al léxico del país al que se está visitando, es un desafío grande, pero no imposible de resolver. Así que, estudia al país que visitará, y sustituye las palabras para que el chiste cobre el mismo sentido.
Según Sorto, hoy en día es mucho más fácil poder iniciar en el mundo de la comedia. Buscar información por internet, presentarse en micrófonos abiertos y sobre todo perder el miedo a presentarse en grupos pequeños, con el objetivo de desarrollarse mucho mejor con el público para los que desean iniciar en el stand up comedy.
La trayectoria que William Sorto ha recorrido es extraordinaria y admirable, puesto que, no ha sido un camino fácil, y aunque él sigue aprendiendo e informándose, no deja de perseverar y escalar en su carrera como comediante.
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