“Hubo un par de veces que la guerrilla interrumpía las clases y nos llegaba a sacar con las manos en la cabeza…”: Antonio Alcántara, profesor de matemáticas y ciencia física.
Desde la Edad Antigua, la docencia es una de las profesiones más importantes para el desarrollo dentro de una sociedad, llegándose a considerar unos sabios a todos aquellos que tengan esa capacidad de enseñar a otros. Asimismo, se les da un reconocimiento extra a todos aquellos que se aventuran en una materia que nos ha hecho sufrir dolor de cabeza: las matemáticas. También, podemos mencionar a grandes figuras sobresalientes en esta área como a Euclides, Hipatia de Alejandría, Isaac Newton, entre muchos otros.
Es por ello, que para el Licenciado en Matemáticas, graduado de la Universidad de El Salvador (UES), Antonio Alcántara, de 56 años, originario del municipio de Santo Tomás, departamento de San Salvador, manifiesta que ha sido una satisfactoria travesía durante toda su vida profesional como maestro.
Con 31 años de experiencia, el Alcántara se ha ganado el respeto por parte de sus estudiantes y compañeros de trabajo gracias a su dedicación y desempeño. Actualmente, se encuentra laborando como profesor de Matemáticas y Ciencias Físicas para tercer ciclo en el Centro Escolar Católico Nuestra Señora de Fátima, donde lleva 12 años trabajando en dicha institución.
Al ser considerado un habilidoso para esta rama, se ganó el sobrenombre por parte de sus colegas como “Alca-Newton”, que se deriva de su apellido Alcántara y el gran físico Isaac Newton. Menciona que se lo toma de cariño y le gusta que lo llamen así.
Algunas de las anécdotas que nos comparte, es cuando en época de guerra en El Salvador, específicamente en el año 1988, cuando él aún estaba como estudiante, fue cuando la guerrilla sacó a los alumnos de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas en forma de intimidación hacia el gobierno de esa época. “Hubo un par de veces que la guerrilla interrumpía las clases y nos llegaba a sacar con las manos en la cabeza. A uno le tocaba hacer caso o ya sabía a lo que se enfrentaba”, recordó Alcántara.
Por otra parte, el maestro manifiesta un pequeño disgusto dentro de su vida profesional, ya que señala que no se le da la prioridad necesaria a esta ocupación y no es pagada como realmente debe ser. Sin embargo, declara que para él eso no es un impedimento para seguir esa etapa de enseñanza hacia las demás personas o sus respectivos estudiantes.
Además, expresó que los estudiantes han bajado su nivel, académicamente hablando, desde primer grado hasta los universitarios. Manifiesta que, hace unos cinco años atrás, el declive iba en aumento, pero con la época de pandemia en 2020, terminó de hundir a los alumnos, haciéndolos más simples, carentes y falto de interés. “Me parece que las nuevas herramientas digitales en vez de sacarles provecho, la ocupan para el ocio y otra cosa que no los edifica en sus estudios. Asimismo, ahora los jóvenes encuentran todo en internet; sólo copian y pegan información, ni siquiera leen”, agregó.
Retomando el tema de época de pandemia, menciona el profesor que no fue muy difícil adaptarse a esa nueva modalidad, ya que había recibido cursos junto a otros docentes sobre plataformas como Google Classroom y Microsoft Teams. Adicionalmente, grabó clases y las subió a la plataforma digital de YouTube para que sus alumnos recibieran la educación pertinente.
Para la jubilación de Alcántara quedan cuatro años, y dice estar demasiado cerca para esa temporada de ocio, y es por ello, que busca desde ya alguna manera de poder invertir su tiempo, porque manifiesta que no podría estar en su casa desocupado, incluso, no se le viene a bien la idea de viajar. No obstante, expresa que no buscaría otro trabajo por falta de dinero, sino por miedo a tener mucho tiempo libre. “Aunque sea de taxista voy a trabajar. ¡No me puedo quedar sin hacer nada!”, comentó el educador.
Y para concluir, exhorta y anima a todos aquellos que quisieran desempeñar esta carrera, recalcando que se debe trabajar por vocación y no por dinero, ya que se debe tener en cuenta que vamos a invertir mucho tiempo en algo que verdaderamente nos apasiona, y de cierto modo, nos dará una estabilidad económica y mental.
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