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  • Foto del escritorGabriela Torres

Mario Hernández como pescador


Un día asoleado, la tarde del viernes 31 de mayo, en el Puerto de La Libertad, se encuentra Mario Hernández, un pescador de 52 años de edad, esposo y padre de familia.


En la actualidad su dedicación está completamente al oficio de la pesca, pasa los 5 días de la semana a tiempo completo, afirma que desde los 14 años comenzó a dedicarse a la pesca.


Lo que motivó a don Mario a dedicarse a este oficio, fue la ganancia que se tenía años atrás, ya que en sus tiempos la pesca se movía más en la que era todo un negocio estable.


Antes la pesca era mejor, se ganaba más, había más producto, en cambio, ahora es diferente.

Recalcó don Mario; reconoce que antes la pesca era más valorada, tanto como en el área del producto, así también en la venta.


Desde el 2 de septiembre del año 2023, a causa de un fuerte oleaje, ocurrió un desarreglo en la grúa que se utiliza para movilizar las lanchas al mar.



Debido a ello, fue necesario que permaneciera cerrado el muelle, ocasionando perjuicio al comercio trayendo una disminución a las ventas, don Mario recalca que, como trabajadores, y comerciantes de la pesca, se les dificultó el mantenerse económicamente debido a que sus familias dependen del oficio que ellos realizan para salir adelante día a día.



Dado a este inconveniente, don Mario y sus compañeros de trabajo se vieron obligados a tomar la única alternativa de entrar con sus lanchas a playas abiertas para salir al mar y seguir pescando. Al principio para don Mario, se le fue difícil el adaptarse a entrar al mar de esa manera, pero poco a poco se fue adaptando.


El ingreso al mar a través de las playas, ocasiono un fracaso afirmo don Mario


Mi lancha la anduve en la playa, fracasamos, dimos vuelta, perdimos equipos, lo único que a nosotros no nos pasó nada.

Destaco. Para don Mario fue una perdida, ya que sus equipos fueron arrastrados por las fuertes olas de la playa, debido a que sin el equipo de trabajo no podía salir hacer sus labores, pero la suerte los alcanzo, no hubo afectados, saliendo de la playa con bien a tierra firme.


La escena de Don Mario resultó sumamente compleja e inolvidable. Su existencia se encontraba en un estado de riesgo, y en cualquier momento podía surgir una desgracia. A pesar de poner su vida en peligro, reconoce que la pesca es un privilegio, ya que muchos deseaban experimentar el subirse a una lancha y estar dentro del mar.


Don Mario expone la presencia de diversas especies de peces de gran tamaño, tales como los tiburones y las ballenas. A pesar de dificultades y peligros, disfruta de su trabajo, recalca que las experiencias dentro del mar son únicas.

Una vez que Salí a pescar de noche con mi compañero, estando dentro del mar, la lancha comenzó a dar vuelta a una dirección contraria, y se escuchaba como golpeaban la lancha luego de eso se empezaron a oír unos sonidos extraños, no se distinguía bien el sonido, a veces se escucha lejos y a veces cerca.

Revela que dentro del mar ha tenido sustos inexplicables.


Para don Mario Hernández, la pesca no solo es un oficio de donde depende para su diario vivir, si no que además de ser un trabajo, es un pasatiempo favorito, en la cual lo desempaña con amor.


 

Audio cover
Feliz de ser pescador.Don Mario Hernández.

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