La participación en procesiones, misas y otros actos de devoción es una forma en que los católicos salvadoreños manifiestan su amor y respeto hacia Jesucristo y su crucifixión. Para algunos salvadoreños estas son formas que hacen recordar el sufrimiento de Jesús, retomando así la fe que tienen en Él, para cumplir la misión redentora puesta en la humanidad. Tal como lo menciona el feligrés Juan “[…] Viernes Santo, empezábamos a las 6 a.m. con ir apartar el pedazo de la calle, los demás a la procesión y otros a hacer la alfombra después del viacrucis se preparaban los estandartes para el santo entierro, algunos se quedaban por el sermón de las siete palabras, los demás haciendo alfombra hasta las 6:30 p.m. más o menos después irte a bañar, comer un poco y volver a la iglesia para coordinar a los niños, y adultos a que no se fuera casi encima de la urna donde llevaban a papá Dios, después se hacía un mini ensayo con la urna y ya llegaba a mi casa tipo 1 de la madrugada cansado pero feliz. Sábado Santo descansaba todo el día y en la noche la vigilia que llegaba hasta las 3:00 a.m. y a las 4:00 a.m. la misa. Yo después de la homilía me dormía, pero así era mi Semana Santa creo que es y ha sido lo mejor que me puede pasar […]”
Conociendo la opinión del feligrés podemos darnos cuenta de lo importante que son estas fechas para él, así mismo se puede notar el fuerte compromiso con la fe y el servicio que tiene hacia Dios, su goce y devoción al participar en esas actividades de su iglesia, lo que le hace sentirse orgulloso de la lealtad que tiene hacia Dios.
El Domingo de Pascua, es una celebración importante para los cristianos de todo el mundo, ya que en este día se celebra la resurrección de Jesucristo, después de haber sido crucificado y sepultado. Tal como lo menciona Lucas “[…] y como tuvieron temor, y bajaron el rostro a tierra, les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? No está aquí, sino que ha resucitado. Acordaos de lo que os habló, cuando aún estaba en Galilea […]” (Lucas 24:5-6).
Este versículo es una clara invitación a la reflexión sobre la importancia de la fe y la esperanza; los discípulos de Jesús estaban en un momento de gran confusión y dolor después de la muerte de su maestro. Sin embargo, la resurrección de Jesús les recordó que la vida no termina con la muerte y que hay esperanza más allá de la oscuridad. En El Salvador, la celebración del Domingo de Resurrección comienza con la misa de la madrugada, que se lleva a cabo antes del amanecer. Esta misa se llama "Misa de Resurrección" y es una de las más importantes del año. Durante la misa, se realiza la procesión del Santo Sepulcro, que representa el momento en que Jesús resucitó de entre los muertos.
Si deseas leer más artículos relacionados a Semana santa, te recomendamos entres al siguiente link
Comentarios